el nacimiento


Un martes seco, pero lleno de vos..

las torpezas se fueron hace tiempo, desde el momento en que empecé a reirme tras cada palabra tuya..

porque tal vez iniciamos un juego de martes.

palabra tras palabra..


...gana tras gana.


¡Cómo me gustás cada vez que nacés.. a través de esta pantalla!


..nacés de color verde y cursiva.

1 comentarios:

Unknown dijo...

La palabra siempre tiene su propia intensidad, dormida o despierta, latente o manifiesta. Cuando la palabra, además, es un juego, esa intensidad es aun superior. Yo sé que te quedan muchas palabras y días de la semana, juegos y algún extraño del otro lado lado de la ventana que nacerá, fielmente, con un color verde y en cursiva. ¡Abrazo!